Torah para Vivir

Torah para Vivir

23 feb 2014

Sabemos amar?


Perdidos, sin idea de cómo deberíamos amar, vamos por el mundo pidiendo limosnas de atención, y rogando por ser aceptados... Hacemos lo que otros quieren, lo que otros esperan de nosotros, tratando de obtener esa valoración que tanto necesitamos...
Hacemos bondades para que nos consideren buenos o nos disfrazamos de "liberales" para encanjar en la locura de lo instantáneo y descartable...
Y la verdad es que no existe manera de amar honestamente a otros, si antes no nos amamos a nosotros mismos de manera incondicional, no por los resultados, no por las apariencias de éxitos, sino porque somos lo que somos, hijos de un Padre único y amorosamente infinito...
Guerras, racismo, odio, envidia, celos, falta de empatía, falta de interes, adicciones, depresiones, apatía, agresiones, chusmerío, promiscuidad, son síntomas del desamor.
Y lo que se requiere para curarnos y curar el mundo, no es tratar de agradar a cualquiera, ni obtener millones de "likes", no es el status ni el dinero, ni la belleza ni la juventud, ni el carisma ni el talento, lo que se necesita, es saber que cada uno tiene algo importante que hacer con su propia vida, más allá de los aplausos, y más allá de la aceptación.
La vida de todos tiene un sentido y es un sentido físico y metafísico, visible e invisible, evidente y oculto...
Sólo Di-s sabe cuán importantes somos para el mundo...
Y si aprendemos a oír Su Voz llamándonos, amándonos, alentándonos, podremos sentirnos seguros en Su Amor y entonces ser...
Cuando el amor late en nuestro corazón, podemos amar a otros y ayudarlos a crecer...
Di-s muchas veces habla "bajito" y casi todo el tiempo, habla en "silencio"...
 Él nos envía con un sentido y nos sostiene con un sentido y nos enfrenta a los mayores desafíos con un sentido, Su amor vive en cada uno de nosotros, en cada respiración.


1 comentario:

Fernanda Maria Souza Bias dijo...

Olhando para tudo que me cerca e para tudo que já valorizei um dia,faço a mim mesma esta pegunta. Ouço no funda da minha alma para continuar caminhando, principiando por amar ao D'us Único que a seu tempo revelará a resposta desde que eu continue na busca.
Talvez eu não saiba amar, mas eu quero aprender a amar.